lunes, 2 de agosto de 2010

Reflexiones sobre los cambios políticos en América Latina. Las clases medias y el sistema de poder

Los fenómenos de movilidad y comunicación de masas en los países capitalistas desarrollados, así como la modificación del esquema capitalista de las clases en los países de cultura soviética, han creado una serie de imágenes falsas acerca de la estructura social, de la naturaleza, dinámica y actitud de los grupos sociales. En los países capitalistas es evidente que se ha complicado el esquema clásico burguesía-proletariado, no sólo por la proliferación y diversificación de las clases medias, sino también por el fenómeno dialéctico del transbordo de las ideologías de una clase a otra, de la burguesía a las clases medias y al proletariado. 

El caso de Estados Unidos demuestra la medida en que el proletariado industrial puede aburguesarse, alineándose a la ideología de las clases dominantes, en la medida en que participa de las aspiraciones, valores culturales y conquistas materiales de esa sociedad opulenta.
En términos estrictos, el proletariado de los países industriales, que desempeñan funciones hegemónicas en la economía mundial, constituye una aristocracia obrera que, en apreciable medida, comparte con las clases dominantes los beneficios económicos de una estructura colonial de las relaciones mundiales de intercambio. Ésta es la razón fundamental de que ese tipo de proletariado satisfecho y pragmático –no importa cual sea el grado de concentración de la riqueza y del poder en el marco de la sociedad industrial- enfoque del problema de las relaciones sociales o de las relaciones entre la potencia hegemónica y los países atrasados, desde una perspectiva burguesa. En este sentido, no es mucho lo que sabemos sobre esta forma de aburguesamiento del moderno proletariado industrial y su “alineación opulenta”. El desgarramiento interno de esas “sociedades satisfechas” y en las que el proletariado ha dio identificándose con los objetos tecnocráticos del sistema de vida, no se ha provocado por la acción del esquema burguesía-proletariado, sino por la actitud insurreccional de las poblaciones racialmente discriminadas. El epicentro de la lucha social en Estados Unidos no se relaciona con la estructura burguesa de la Federación Americana del Trabajo sino con los “ghettos”, donde se refugia el Poder Negro o el Poder Cobrizo. ¿En qué medida estos factores sociales están modificando el esquema clásico de las clases y de las luchas sociales?
 


Revista Mexicana de Sociología. Vol. XXX. 1968

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